La lucha por la reforma sanitaria permitió añadir al campo de la salud nociones de determinantes sociales que interfieren directamente en el proceso salud-enfermedad de los usuarios. Como resultado, el pensamiento sobre el individuo ahora abarca la totalidad del individuo, incluyendo la cultura, la sociabilidad, el ocio, el trabajo y otras esferas. Por ello, este trabajo pretende debatir sobre el papel del Trabajo Social en la Atención Primaria de Salud, sus intervenciones, avances y retos actuales. El trabajo social tiene sus orígenes en la filantropía y la caridad, pero su introducción en la asistencia sanitaria, que se remonta a la década de 1930, se fundó en el interés por educar a los individuos de forma individualizada, centrándose en la vida privada, como el control de la natalidad, las enfermedades infantiles y la higiene bucal. De esta forma, se observa que el trabajo del profesional reafirma la naturalización de las condiciones de vulnerabilidad y culpabiliza a los individuos, no comprendiéndolos como un todo y negando la responsabilidad del Estado como órgano prioritario en la formulación de políticas públicas y sociales. En los 33 años transcurridos desde la creación del Sistema Único de Salud (SUS), el Servicio Social como categoría profesional ha intensificado continuamente su defensa de la integralidad y del acceso a la salud como derecho definido tras la redemocratización, uniéndose al Movimiento de Reforma Sanitaria. Desde 1979, con el Congreso de Virada, los trabajadores sociales se propusieron contribuir para la afirmación de un Proyecto Ético-Político contra-hegemónico, enraizado en reflexiones que piensan la cuestión social y sus expresiones en el campo de la salud y más allá. Al mismo tiempo, la perspectiva de los Centros Ampliados de Salud de la Familia (hoy Equipos Multiprofesionales) ha traído avances a la categoría profesional desde la perspectiva de la autonomía, de los determinantes sociales y de mejores intervenciones que corroboren la longitudinalidad de la atención a la salud. Sin embargo, este pensamiento se ha visto sometido a una serie de enfrentamientos en los que constantemente se plantean retos en todos los niveles asistenciales, especialmente en Atención Primaria, dada la incomprensión del trabajo de los Trabajadores Sociales por parte de otros profesionales, la asociación con la filantropía/caridad, la precariedad del trabajo y los desencuentros entre las políticas que orientan el Sistema Único de Asistencia Social y el Sistema Único de Salud. Sin embargo, el Servicio Social en la salud desempeña un papel crucial en la promoción de la equidad, la accesibilidad y la calidad de los servicios ofrecidos de forma multifacética, desde la acogida y el seguimiento de los usuarios hasta el enlace con las políticas públicas y las redes de apoyo.