El derecho a la salud está consagrado por la Declaración Universal de Derechos Humanos de las Naciones Unidas y el Pacto Internacional de Derechos Económicos, Sociales y Culturales, así como en la constitución de diversos Estados, sin embargo, muchas veces se hace evidente que en la práctica el derecho universal a la salud no es tan universal, ni tan garantizado, pues los migrantes al necesitar algún servicio de salud ignoran que tienen derecho al mismo, se enfrentan a barreras como el idioma, el respeto a la religión o a prácticas culturales, lo que hace evidente la falta de capacitación de los profesionales de la salud para atender migrantes, refugiados y apátridas. Lo anterior hace que los migrantes, refugiados y apátridas sean susceptibles de sufrir violencia médica, sea ella psicológica, física, obstétrica, sexual, negligencia o inclusive, la privación de los debidos cuidados. Así, usamos el concepto de Homo Sacer de Giorgio Agamben para definir al migrante como aquella figura del derecho, que parafraseando a Hannah Arendt, no tiene derecho a tener derechos, en consecuencia, no sólo es susceptible de violencias, sino que la violencia en sus diversos tipos, es permitida contra él.
Objetivo: Analisar o direito à saúde dos migrantes e refugiados dentro do Estado Nação desde a ótica de Giorgio Agamben
Método: Fue desarrollada una revisión de literatura, principalmente de las obras Homo sacer I - o poder soberano e a vida núa (2004) de Giorgio Agamben; Nós os refugiados (2013) de Hannah Arendt e Extranjeros residentes (2019) de Donatella Di Cesare. Se revisaron artículos científicos en diferentes bases de datos, utilizando las siguientes entradas: Salud de los migrantes, Salud de los refugiados, Derechos Humanos, Homo sacer, Estado y soberanía.
Resultados: La persona en situación de movilidad en teoría tenga derecho a la salud, en la práctica el acceso al mismo se vea dificultado o se le hace sentir que es una dádiva del. Por lo que es el Estado se levanta como soberano y hace ver y entender dicha soberanía colocando separadamente al migrante, fuera de la comunidad política, así, la posibilidad de violencia no sólo es posible, sino que es una posibilidad necesaria, así el migrante, en palabras de Agamben, es una vida desnuda, sin derechos.
Considerações finais: Aunque en teoría el derecho a la salud de los migrantes está garantizado por diversos instrumentos jurídicos internacionales y algunos Estados cuentan con normativas al respecto, en la práctica los migrantes tienen dicho derecho violado pues el Estado no lo garantiza realmente.